Se mostró horrorizado ante las terribles mutilaciones y se inscribió en el grupo ‘‘Catch the Kat Killer!'' de Facebook.
Pero la policía dijo que no se dejó engañar y alega que las redes sociales de Tyler Hayes Weinman lo condujeron a él. Weinman fue arrestado el domingo por la muerte de 19 gatos.
La audiencia para la fianza del joven fue pospuesta este lunes debido a que su abogado no estaba presente y a que la orden de arresto contra Weinman, que habia sido sellada por un juez anteriormente, no estaba en el expediente.
El ex alumno de último año de la secundaria Miami Palmetto dividía su tiempo entre la casa de sus padres divorciados, que vivían en Palmetto Bay y Cutler Bay, respectivamente, donde ocurrieron los asesinatos. La policía, sobre la base de pistas recibidas en la comunidad y de leer sus páginas de Facebook y MySpace, estuvo vigilando a Weinman durante semanas.
El sábado por la noche asistió a una fiesta en casa de Kevin Corona en Coral Gables. A eso de la medianoche los investigadores registraron minuciosamente la casa de su madre. Alrededor de las 12:30 a.m., dos hombres en camisas de civil y jeans llegaron a casa de Corona y preguntaron por Weinman. Luego lo escoltaron afuera discretamente.
"Disfruten su fiesta'', recordó Corona que le dijo uno de ellos. Los hombres eran policías.
El domingo a la 1:23 p.m. Weinman fue detenido en el Centro Correccional Turner Guilford Knight y se le fijó una fianza de $154,500.
Cuando llegó el momento de fotografiarlo como parte de la detención, Weinman, de cuidada apariencia, sonrió a medias.
Lo acusaron de 19 cargos de crueldad en primer grado contra animales, 19 cargos de deshacerse indebidamente de cadáveres de animales y cuatro cargos de allanamiento de morada. Cada uno de los cargos de primer grado conlleva una multa obligatoria mínima de $5,000, seis meses de cárcel y someterse a tratamiento sicológico.
El abogado de Weinman, David Macey, dijo que su cliente es inocente. El domingo no fue posible contactar a sus padres, Alba y Douglas, para que comentaran.
Tanto políticos como policías criticaron duramente al sospechoso.
Katy Sorenson, comisionada condal de Miami-Dade, que representa a ala zona, lo calificó de "retorcido y depravado, alguien que no es un ser humano normal''.
"Por suerte para esta comunidad'', dijo Sorenson, "ya el terror ha terminado''.
El alcalde de Palmetto Bay, Eugene Flinn, dijo que es difícil de imaginar un motivo: ‘‘Nadie puede explicarse la conducta de una persona capaz de algo tan odioso''.
Las muertes de otros 15 gatos en la zona no han podido explicarse hasta el momento porque la la policía no ha podido vincularlas con Weinman. Algunos de esos gatos, o todos, podrían haber perecido por ataques de perros, según las autoridades.
La agente Julie Miller, de la Policía de Miami-Dade, dijo que la investigación continuaba su curso y que podía ampliarse a otras jurisdicciones.
Según la policía, Weinman destripó a a algunos de los gatos y los dejó en el jardín de la casa de los dueños.
Pero la policía dijo que no se dejó engañar y alega que las redes sociales de Tyler Hayes Weinman lo condujeron a él. Weinman fue arrestado el domingo por la muerte de 19 gatos.
La audiencia para la fianza del joven fue pospuesta este lunes debido a que su abogado no estaba presente y a que la orden de arresto contra Weinman, que habia sido sellada por un juez anteriormente, no estaba en el expediente.
El ex alumno de último año de la secundaria Miami Palmetto dividía su tiempo entre la casa de sus padres divorciados, que vivían en Palmetto Bay y Cutler Bay, respectivamente, donde ocurrieron los asesinatos. La policía, sobre la base de pistas recibidas en la comunidad y de leer sus páginas de Facebook y MySpace, estuvo vigilando a Weinman durante semanas.
El sábado por la noche asistió a una fiesta en casa de Kevin Corona en Coral Gables. A eso de la medianoche los investigadores registraron minuciosamente la casa de su madre. Alrededor de las 12:30 a.m., dos hombres en camisas de civil y jeans llegaron a casa de Corona y preguntaron por Weinman. Luego lo escoltaron afuera discretamente.
"Disfruten su fiesta'', recordó Corona que le dijo uno de ellos. Los hombres eran policías.
El domingo a la 1:23 p.m. Weinman fue detenido en el Centro Correccional Turner Guilford Knight y se le fijó una fianza de $154,500.
Cuando llegó el momento de fotografiarlo como parte de la detención, Weinman, de cuidada apariencia, sonrió a medias.
Lo acusaron de 19 cargos de crueldad en primer grado contra animales, 19 cargos de deshacerse indebidamente de cadáveres de animales y cuatro cargos de allanamiento de morada. Cada uno de los cargos de primer grado conlleva una multa obligatoria mínima de $5,000, seis meses de cárcel y someterse a tratamiento sicológico.
El abogado de Weinman, David Macey, dijo que su cliente es inocente. El domingo no fue posible contactar a sus padres, Alba y Douglas, para que comentaran.
Tanto políticos como policías criticaron duramente al sospechoso.
Katy Sorenson, comisionada condal de Miami-Dade, que representa a ala zona, lo calificó de "retorcido y depravado, alguien que no es un ser humano normal''.
"Por suerte para esta comunidad'', dijo Sorenson, "ya el terror ha terminado''.
El alcalde de Palmetto Bay, Eugene Flinn, dijo que es difícil de imaginar un motivo: ‘‘Nadie puede explicarse la conducta de una persona capaz de algo tan odioso''.
Las muertes de otros 15 gatos en la zona no han podido explicarse hasta el momento porque la la policía no ha podido vincularlas con Weinman. Algunos de esos gatos, o todos, podrían haber perecido por ataques de perros, según las autoridades.
La agente Julie Miller, de la Policía de Miami-Dade, dijo que la investigación continuaba su curso y que podía ampliarse a otras jurisdicciones.
Según la policía, Weinman destripó a a algunos de los gatos y los dejó en el jardín de la casa de los dueños.