Jurado militar EUUU declara culpable a ex conductor de Bin Laden
El veredicto llegó diez días después de que comenzara el juicio en las polémicas "comisiones militares", creadas por el Gobierno del presidente George W. Bush para juzgar fuera de las cortes civiles y militares ordinarias los casos relacionados con terrorismo tras los atentados del 11 de septiembre de 2001.
Hamdan podría afrontar una pena de cadena perpetua al haber sido declarado culpable de cinco de los ocho cargos específicos que le imputaban relacionados con el apoyo al terrorismo, según fuentes del Departamento de Defensa, que no dio mayores detalles de las imputaciones.
La Fiscalía acusaba a Hamdan, de origen yemení, de conspirar y apoyar al terrorismo, así como de servir al líder de la organización terrorista Al Qaeda en Afganistán durante más de cinco y años y de participar en la trama de los atentados de 2001.
Hamdan, que reconoció haber sido conductor de Bin Laden, se declaró no culpable en el transcurso del juicio y rechazó haber jurado "bayat" (lealtad en árabe) a Bin Laden y a Al Qaeda.
Su defensa alegó que el acusado trabajó para Bin Laden porque necesitaba los 200 dólares mensuales que recibía de salario, pero sin adherirse a Al Qaeda, y lo comparó con un "contratista civil" como los que trabajan para el Pentágono.
La defensa de Hamdan temía que el veredicto de culpabilidad fuera inevitable, según dijo su abogado, el comandante Brian Mizer, poco antes de conocer la sentencia.
"El sistema del tribunal especial de Guantánamo parece diseñado para lograr declarar culpables a los detenidos", dijo Mizer, quien se quejó de que este tribunal haya admitido pruebas que no hubiera aceptado ninguna corte civil.
Estos tribunales han sido rechazados por las organizaciones de derechos humanos y cuestionadas ante el Tribunal Supremo.
En junio pasado, el Supremo admitió que los presuntos terroristas, considerados "combatientes enemigos ilegales" por el Gobierno, tenían derecho a cuestionar ante los tribunales ordinarios de EE.UU. la legalidad de su detención.
Los abogados de Hamdan presentaron una demanda ante la Corte del Distrito de Columbia para intentar detener el juicio en Guantánamo, pero finalmente el tribunal federal decidió que se siguiera con el proceso.
Hamdan podría afrontar una pena de cadena perpetua al haber sido declarado culpable de cinco de los ocho cargos específicos que le imputaban relacionados con el apoyo al terrorismo, según fuentes del Departamento de Defensa, que no dio mayores detalles de las imputaciones.
La Fiscalía acusaba a Hamdan, de origen yemení, de conspirar y apoyar al terrorismo, así como de servir al líder de la organización terrorista Al Qaeda en Afganistán durante más de cinco y años y de participar en la trama de los atentados de 2001.
Hamdan, que reconoció haber sido conductor de Bin Laden, se declaró no culpable en el transcurso del juicio y rechazó haber jurado "bayat" (lealtad en árabe) a Bin Laden y a Al Qaeda.
Su defensa alegó que el acusado trabajó para Bin Laden porque necesitaba los 200 dólares mensuales que recibía de salario, pero sin adherirse a Al Qaeda, y lo comparó con un "contratista civil" como los que trabajan para el Pentágono.
La defensa de Hamdan temía que el veredicto de culpabilidad fuera inevitable, según dijo su abogado, el comandante Brian Mizer, poco antes de conocer la sentencia.
"El sistema del tribunal especial de Guantánamo parece diseñado para lograr declarar culpables a los detenidos", dijo Mizer, quien se quejó de que este tribunal haya admitido pruebas que no hubiera aceptado ninguna corte civil.
Estos tribunales han sido rechazados por las organizaciones de derechos humanos y cuestionadas ante el Tribunal Supremo.
En junio pasado, el Supremo admitió que los presuntos terroristas, considerados "combatientes enemigos ilegales" por el Gobierno, tenían derecho a cuestionar ante los tribunales ordinarios de EE.UU. la legalidad de su detención.
Los abogados de Hamdan presentaron una demanda ante la Corte del Distrito de Columbia para intentar detener el juicio en Guantánamo, pero finalmente el tribunal federal decidió que se siguiera con el proceso.