Madrid.- La policía española ha desarticulado una banda que presuntamente extorsionaba a empresarios en nombre del grupo terrorista ETA y ha detenido a cinco personas, entre ellos, dos brasileños y dos dominicanos, según informaron hoy fuentes de la investigación.
El pasado 7 de enero tres empresarios denunciaron a la policía que habían recibido una carta a su nombre con los sellos de ETA fechada el 2 de enero y durante los siguientes días se registraron numerosas denuncias similares en todo el país.
Las cartas, que contenían amenazas personales, exigían el pago de cantidades comprendidas entre los 15.000 y 50.000 euros (22.050 y los 73.500 dólares), así como las instrucciones para pagar la cantidad solicitada y un numero de teléfono móvil, con el que debía contactar el empresario.
Si en un plazo de 24 horas no se recibía respuesta por parte del empresario extorsionado, la carta señalaba que se haría "acreedor de las medidas que ETA decida aplicar sobre usted, sus bienes y familiares, convirtiéndose en objetivo operativo de nuestro brazo armado".
Las autoridades descartaron la implicación de ETA desde el comienzo de la investigación porque las cartas presentaban notables diferencias con las que suele enviar la banda terrorista.
El pasado 15 de enero se pactó una entrega de dinero en el centro de Madrid, después de que efectivos del grupo de investigación negociasen en nombre de dos empresas que se prestaron a la colaboración. En esta ocasión, el policía detuvo a dos ciudadanos brasileños que acudieron a cobrar el dinero.
Tras el arresto de los brasileños, se logró identificar a un hombre dedicado a la importación de productos electrónicos procedentes de China y con domicilio en la República Dominicana, que fue localizado por los agentes y detenido junto a otras dos empleadas, en Madrid.
En los registros realizados en los inmuebles propiedad del último uno de los detenidos se han incautado el teléfono utilizado para comunicar con las empresas, así como distinto material informático, sellos y cartas y una lista de empresas con teléfonos y direcciones, entre las que figuran las empresas extorsionadas.
Hasta el momento ninguna evidencia indica pertenencia o colaboración con banda armada por parte de los detenidos, aunque la investigación continúa abierta, indicaron fuentes policiales.