Santiago, emitió los mensajes amenazantes en su espacio del sitio Facebook, por lo que muchos de sus compañeros, aterrorizados, leyeron los textos y notificaron de inmediato a las autoridades universitarias y estas a los federales. La amenaza del estudiante universitario dominicano, fueron publicadas el lunes y el martes de esta semana.
Un juez le impuso una fianza de $ 6, 000 dólares de los cuales pagó $2,000 para salir provisionalmente en libertad. Tendrá que regresar a la corte el próximo 1ro. de octubre. Si es declarado culpable enfrenta hasta 7 años en la cárcel.
Santiago, le dijo al tabloide Daily News que cuando escribió los mensajes, estaba borracho y que nunca ha tenido la intención de hacerle daño a nadie. Los fiscales de Queens lo acusan de haber atentado contra las vidas de sus compañeros de clases, profesores y empleados administrativos de la reconocida universidad.
En los textos, Santiago, hizo referencia a la masacre cometida por un estudiante coreano en el Instituto Tecnológico Virginia (Virginia Tech) en el 2007 y donde asesinó a casi 40 de sus colegas de aulas.
“No quise decir nada de eso”, dijo el estudiante criollo, explicando que “no realmente yo, estaba bajo la influencia del alcohol, hice algo estúpido y quiero pedirle disculpas a todo el mundo”, añadió. Dijo que lamenta la pérdida de su buen nombre.
“He arruinado mi reputación, la gente no me volverá a ver de la misma forma nunca más”, sostuvo el acusado. El fiscal de distrito en Queens, Richard Brown señaló que en algunos de los mensajes a través de Facebook, Santiago dijo que se estaba volviendo loco y que la gente iba a ver que haría lo mismo que se hizo en Virginia Tech, en alusión a la masacre estudiantil del 2007.
En otros mensajes alertó a que la gente sintonizara la cadena de noticias CNN para que siguieran la masacre. El fiscal dijo que los estudiantes tienen que sentir que están en un ambiente seguro cuando asisten a sus escuelas y que no permitirá que intentos perturbadores o amenazas de muerte y/o terroristas, alteren la paz de los recintos académicos.
El dominicano es estudiante de psicología y detalló que antes de escribir las amenazas en su computador, estaba disfrutando de una fiesta con sus amigos. “Estoy pasando por un montón de situaciones personales en este momento”, dijo, mientras su padre Radares Santiago indicó que la familia está muy decepcionada de su hijo.
“No nos dimos cuenta de esto y esperamos que termine aquí”. La rectoría de la Universidad de Saint John no hizo ninguna declaración al respecto y se limitó a decir que coopera con las investigaciones de las autoridades.
Un juez le impuso una fianza de $ 6, 000 dólares de los cuales pagó $2,000 para salir provisionalmente en libertad. Tendrá que regresar a la corte el próximo 1ro. de octubre. Si es declarado culpable enfrenta hasta 7 años en la cárcel.
Santiago, le dijo al tabloide Daily News que cuando escribió los mensajes, estaba borracho y que nunca ha tenido la intención de hacerle daño a nadie. Los fiscales de Queens lo acusan de haber atentado contra las vidas de sus compañeros de clases, profesores y empleados administrativos de la reconocida universidad.
En los textos, Santiago, hizo referencia a la masacre cometida por un estudiante coreano en el Instituto Tecnológico Virginia (Virginia Tech) en el 2007 y donde asesinó a casi 40 de sus colegas de aulas.
“No quise decir nada de eso”, dijo el estudiante criollo, explicando que “no realmente yo, estaba bajo la influencia del alcohol, hice algo estúpido y quiero pedirle disculpas a todo el mundo”, añadió. Dijo que lamenta la pérdida de su buen nombre.
“He arruinado mi reputación, la gente no me volverá a ver de la misma forma nunca más”, sostuvo el acusado. El fiscal de distrito en Queens, Richard Brown señaló que en algunos de los mensajes a través de Facebook, Santiago dijo que se estaba volviendo loco y que la gente iba a ver que haría lo mismo que se hizo en Virginia Tech, en alusión a la masacre estudiantil del 2007.
En otros mensajes alertó a que la gente sintonizara la cadena de noticias CNN para que siguieran la masacre. El fiscal dijo que los estudiantes tienen que sentir que están en un ambiente seguro cuando asisten a sus escuelas y que no permitirá que intentos perturbadores o amenazas de muerte y/o terroristas, alteren la paz de los recintos académicos.
El dominicano es estudiante de psicología y detalló que antes de escribir las amenazas en su computador, estaba disfrutando de una fiesta con sus amigos. “Estoy pasando por un montón de situaciones personales en este momento”, dijo, mientras su padre Radares Santiago indicó que la familia está muy decepcionada de su hijo.
“No nos dimos cuenta de esto y esperamos que termine aquí”. La rectoría de la Universidad de Saint John no hizo ninguna declaración al respecto y se limitó a decir que coopera con las investigaciones de las autoridades.