La institución que informó del contagio fue la Fundación de Salud Médica para la Industria de Adultos, una clínica en el Valle de San Fernando que ofrece sus servicios a actores del porno de Sherman Oaks y Granada Hills.
El nuevo caso, confirmado ayer por el diario Los Angeles Times, es el primero que se da en la industria desde 2004, cuando las producciones de este tipo se detuvieron durante cuatro semanas por temor a un contagio.
En aquel entonces, un actor que regresó de trabajar en Brasil contagió el virus a tres compañeras que habían actuado con él.
Además, otro intérprete transexual, sin relación con los anteriores, también dio positivo.
En el caso actual, las pruebas del VIH realizadas a los compañeros de la actriz han dado negativo, según la Fundación de Salud Médica para la Industria de Adultos.
Esos compañeros de profesión no podrán trabajar por ahora y deben volver a pasar el test en dos semanas, indicó a la publicación Brooke Hunter, administradora de la clínica.
“No es un suceso importante”, dijo Hunter, al señalar que la actriz infectada había trabajado “muy infrecuentemente”.
Este nuevo positivo es la prueba de la batalla que mantienen desde hace años la industria pornográfica con las autoridades sanitarias, que recomiendan el uso de condones en los rodajes.
“No mandarías a nadie a trabajar en la construcción de un edificio alto sin un casco, así que, ¿por qué se les permite a los actores actuar sin condones?”, se preguntó el doctor Jonathan Fielding, oficial sanitario del condado de Los Ángeles, que recibe de promedio mensual entre 60 y 80 nuevos casos de gonorrea y clamidia sólo entre actores de la industria XXX.
El nuevo caso, confirmado ayer por el diario Los Angeles Times, es el primero que se da en la industria desde 2004, cuando las producciones de este tipo se detuvieron durante cuatro semanas por temor a un contagio.
En aquel entonces, un actor que regresó de trabajar en Brasil contagió el virus a tres compañeras que habían actuado con él.
Además, otro intérprete transexual, sin relación con los anteriores, también dio positivo.
En el caso actual, las pruebas del VIH realizadas a los compañeros de la actriz han dado negativo, según la Fundación de Salud Médica para la Industria de Adultos.
Esos compañeros de profesión no podrán trabajar por ahora y deben volver a pasar el test en dos semanas, indicó a la publicación Brooke Hunter, administradora de la clínica.
“No es un suceso importante”, dijo Hunter, al señalar que la actriz infectada había trabajado “muy infrecuentemente”.
Este nuevo positivo es la prueba de la batalla que mantienen desde hace años la industria pornográfica con las autoridades sanitarias, que recomiendan el uso de condones en los rodajes.
“No mandarías a nadie a trabajar en la construcción de un edificio alto sin un casco, así que, ¿por qué se les permite a los actores actuar sin condones?”, se preguntó el doctor Jonathan Fielding, oficial sanitario del condado de Los Ángeles, que recibe de promedio mensual entre 60 y 80 nuevos casos de gonorrea y clamidia sólo entre actores de la industria XXX.