Ahora, la escocesa luce un color de cabello más oscuro y parejo con ondas más suaves. Le delinearon las cejas, un detalle sencillo que rindió frutos capitales. Según el diario sensacionalista The Sun, Boyle, de 47 años, pagó $50 por este cambio de imagen. Muy bien pagos, dirán muchos, porque la mujer se ve mucho mejor.Pero ahí no quedó todo, los arreglitos hasta ahora evidenciados, van acompañados de ropa más moderna. El vestido que lució en el programa televisivo, el que tenía en su armario y con el que se sentía muy cómoda, se sutituyó por una chaqueta de cuero, un pantalón de corte recto y una bufanda en estampado a cuadros. Un cambio sencillo en la selección de ropa que logró maravillas.
El próximo 23 de mayo, los jueces de “Britain’s Got Talent” decidirán si Boyle pasa a la siguiente ronda del concurso en busca de nuevos cantantes. Si esto ocurre o no, la realidad es que la vida de ésta ya no es la misma.Mas Titulares abajo>>
