Oops..! Santa Barbara Vendita....Hallan extrañas pisadas y dicen que son 'del diablo'
Las marcas fueron encontradas por una mujer mayor, Jill Wade, en el patio de su casa y opina que ahora esto ayudará a resolver el misterio que comenzó más de un siglo y medio atrás.
“No pude creerlo. Las pisadas eran como del tamaño y forma de la pezuña de un animal. No había alrededor ninguna otra marca. Me encantaría saber qué fue lo que las dejó”, aseguró la mujer según publica el británico The Sun.
Expertos del Centro Fortean de Zoología inspeccionaron las marcas, a lo largo de 130 metros, y estiman que pudieron haber sido dejadas por un animal similar a un reno, aunque para comprobarlo estiman que necesitarán más estudios.
Sin embargo, lo que llama la atención de los pobladores es que esas extrañas pisadas aparecieron exactamente en el mismo lugar en el que hace 154 años fueron encontradas otras similares.
En ese momento, las pisadas sobre la nieve de Devon marcharon sin perder continuidad pese a que en el camino habían muros, e incluso seguían adentro de depósitos cerrados con llave; todo como si no hubiera ningún tipo de barrera.
Los pobladores, que estaban enojados con el cura de la iglesia local porque les había obligado a cambiar su libro de oraciones, opinaron que el religioso había dejado entrar al diablo a su pueblo.
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“No pude creerlo. Las pisadas eran como del tamaño y forma de la pezuña de un animal. No había alrededor ninguna otra marca. Me encantaría saber qué fue lo que las dejó”, aseguró la mujer según publica el británico The Sun.
Expertos del Centro Fortean de Zoología inspeccionaron las marcas, a lo largo de 130 metros, y estiman que pudieron haber sido dejadas por un animal similar a un reno, aunque para comprobarlo estiman que necesitarán más estudios.
Sin embargo, lo que llama la atención de los pobladores es que esas extrañas pisadas aparecieron exactamente en el mismo lugar en el que hace 154 años fueron encontradas otras similares.
En ese momento, las pisadas sobre la nieve de Devon marcharon sin perder continuidad pese a que en el camino habían muros, e incluso seguían adentro de depósitos cerrados con llave; todo como si no hubiera ningún tipo de barrera.
Los pobladores, que estaban enojados con el cura de la iglesia local porque les había obligado a cambiar su libro de oraciones, opinaron que el religioso había dejado entrar al diablo a su pueblo.
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