Collazo perdió la pelea por votación 114-113 de los jueces Larry Ingle y Garry Ritter y por una disparatada opinión 116-111 de Bill Clancy. Esa última apreciación, de hecho, fue descrita por el portal Secondsout.com como un “absurdo juicio” y el resultado completo como “otra frustrante derrota” para el púgil de origen puertorriqueño y nativo de Brooklyn, Nueva York.
El reportero que Secondsout.com que cubrió la pelea, de hecho, tenía resuelta la batalla como una a favor de Collazo por 115-112.
La pelea estelar del cartel celebrado en el Beau Rivage Resort & Casino en Biloxi, Mississippi, fue una guerra claramente dominada por Collazo en los primeros asaltos y un tanto más pareja en los giros finales.
Un recto de izquierda de Collazo lastimó a Berto en el primer asalto y a partir de ese momento el boricua se dedicó a atacar el cuerpo del campeón mientras que éste utilizaba su velocidad y rítmicas combinaciones para intentar mantener la acción cerrada.
En el tercer asalto, Berto recibió una advertencia por estar amarrándose al boricua y en el siguiente episodio perdió un punto por el mismo detalle lo que le debió a llevar a perder el asalto por dos puntos pues Collazo estaba claramente dominando el mismo.
No obstante su parco inicio, Berto no sufrió pánico y se mantuvo intentando encontrar un buen ritmo.
El foco tampoco lo perdió cuando sufrió una cortadura arriba de su ceja derecha en el quinto round.
Los mejores asaltos para Berto, en tanto, parecieron ser el sexto séptimo y octavo. Collazo, en tanto, ripostó con otras sólidas salidas en el noveno y décimo, logrando en ese último incluso enviar al defensor al piso de espalda.
“Luis Collazo es un animal”, dijo Berto luego de la pelea. “Fue un rival muy difícil. Me llegó con buenos golpes al principio de la pelea”, añadió asegurando estar dispuesto a darle una revancha.
Collazo, por su parte, tomó el resultado con humildad aunque ciertamente se expresó en total desacuerdo con la decisión 116-111.
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El reportero que Secondsout.com que cubrió la pelea, de hecho, tenía resuelta la batalla como una a favor de Collazo por 115-112.
La pelea estelar del cartel celebrado en el Beau Rivage Resort & Casino en Biloxi, Mississippi, fue una guerra claramente dominada por Collazo en los primeros asaltos y un tanto más pareja en los giros finales.
Un recto de izquierda de Collazo lastimó a Berto en el primer asalto y a partir de ese momento el boricua se dedicó a atacar el cuerpo del campeón mientras que éste utilizaba su velocidad y rítmicas combinaciones para intentar mantener la acción cerrada.
En el tercer asalto, Berto recibió una advertencia por estar amarrándose al boricua y en el siguiente episodio perdió un punto por el mismo detalle lo que le debió a llevar a perder el asalto por dos puntos pues Collazo estaba claramente dominando el mismo.
No obstante su parco inicio, Berto no sufrió pánico y se mantuvo intentando encontrar un buen ritmo.
El foco tampoco lo perdió cuando sufrió una cortadura arriba de su ceja derecha en el quinto round.
Los mejores asaltos para Berto, en tanto, parecieron ser el sexto séptimo y octavo. Collazo, en tanto, ripostó con otras sólidas salidas en el noveno y décimo, logrando en ese último incluso enviar al defensor al piso de espalda.
“Luis Collazo es un animal”, dijo Berto luego de la pelea. “Fue un rival muy difícil. Me llegó con buenos golpes al principio de la pelea”, añadió asegurando estar dispuesto a darle una revancha.
Collazo, por su parte, tomó el resultado con humildad aunque ciertamente se expresó en total desacuerdo con la decisión 116-111.
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