Algunos peloteros caribeños se marchan a Asia en plena postemporadaRepública Dominicana es la incubadora que crea y desarrolla un producto que entrega terminado a las Grandes Ligas en un alto porcentaje y en su show anual de corte local, muchos de ellos regresan de los Estados Unidos con recetas muy claras: número de lanzamientos exacto que harán por juego, cantidad de partidos en los que pueden ver acción, no robar bases ni deslizarse violentamente o no ver acción defitivamente por la llamada "fatiga extrema".
Los buenos salarios que paga esa liga oriental, los cuales pueden elevarse y sobrepasar al millón de dólares, se une, ahora, a las restricciones que imponen las franquicias de ligas mayores a sus peloteros; la liga coreana recluta en cada jornada un número de peloteros importante que deja desarticulados a algunos equipos.
El actual evento no ha sido la excepción y ya son conocidas las firmas de Víctor Díaz (Águilas), quien ha sido el rey de los jonrones e incluso dueño del récord para una temporada con 17; así como los lanzadores Francisco Cruceta y Aquilino López (Gigantes), este último, ahora con la condición de pedir permiso a su nuevo equipo para que lo deje actuar al menos hasta la serie final, siempre que los Gigantes lleguen hasta esa etapa.
"Al parecer en la Liga de Corea piensan que el béisbol dominicano es una especie de selva o un patio, donde tienen la potestad de venir a buscar peloteros cuando lo deseen, sin pensar que esos jugadores actúan bajo contratos", se quejó amargamente Laurentino Genao, presidente de los Gigantes del Cibao, el equipo más perjudicado por este nuevo malestar que rompe gran parte de la planificación de los conjuntos afectados, hecho que acontece en la etapa más crítica del torneo, el "round robin".
En el caso de Cruceta, quien en poco tiempo conquistó cuatro triunfos con los Gigantes en la serie regular, éste dejó de lanzar en Dominicana debido a que recibió contrato para actuar en Corea. Mas Titulares abajo>>
F/EspnDeporte
