Pasajeros furiosos por demora de tren incendian vagones
Las empresa privada operadora del servicio, que cotidianamente es blanco de quejas de los usuarios por las malas condiciones en que se viaja, aceptó las demoras y comprendió el enojo de los pasajeros, pero rechazó enérgicamente los hechos de violencia.
"Entendemos la bronca que pueda tener la gente porque el servicio pueda estar interrumpido o demorado, pero de ninguna manera pueden atentar así contra un servicio público," dijo a la televisión local Gustavo Gago, portavoz de la empresa TBA.
La televisión argentina mostró imágenes de las inmensas llamaradas que salían de varios vagones situados en la estación de Merlo de la línea Sarmiento, al oeste de Buenos Aires, mientras que una turba enardecida ocupaba las vías y los trenes en la parada Castelar.
Muchos de los usuarios consultados por los canales de televisión argentinos afirmaron que querían bloquear el servicio porque ellos ya habían perdido su día de trabajo.
"Nosotros queremos ir a nuestro trabajo y no podemos," dijo una joven al canal de noticias C5N.
Los servicios de trenes en Argentina, en su mayoría en manos privadas desde la década de 1990, son una fuente constante de reclamos de los usuarios, que se quejan por las demoras y por viajar "como ganado" desde las afueras de Buenos Aires hacia la ciudad.
En el 2005, los pasajeros ya prendieron fuego a vagones de la misma línea ferroviaria, también furiosos por las largas demoras en el servicio.
"El servicio está saturado. No podemos incrementar la frecuencia de trenes por el sistema de barreras y la verdad es que estamos en un nudo, que se hace difícil la continuidad de la prestación del servicio en las condiciones actuales," añadió el vocero de TBA.
"Entendemos la bronca que pueda tener la gente porque el servicio pueda estar interrumpido o demorado, pero de ninguna manera pueden atentar así contra un servicio público," dijo a la televisión local Gustavo Gago, portavoz de la empresa TBA.
La televisión argentina mostró imágenes de las inmensas llamaradas que salían de varios vagones situados en la estación de Merlo de la línea Sarmiento, al oeste de Buenos Aires, mientras que una turba enardecida ocupaba las vías y los trenes en la parada Castelar.
Muchos de los usuarios consultados por los canales de televisión argentinos afirmaron que querían bloquear el servicio porque ellos ya habían perdido su día de trabajo.
"Nosotros queremos ir a nuestro trabajo y no podemos," dijo una joven al canal de noticias C5N.
Los servicios de trenes en Argentina, en su mayoría en manos privadas desde la década de 1990, son una fuente constante de reclamos de los usuarios, que se quejan por las demoras y por viajar "como ganado" desde las afueras de Buenos Aires hacia la ciudad.
En el 2005, los pasajeros ya prendieron fuego a vagones de la misma línea ferroviaria, también furiosos por las largas demoras en el servicio.
"El servicio está saturado. No podemos incrementar la frecuencia de trenes por el sistema de barreras y la verdad es que estamos en un nudo, que se hace difícil la continuidad de la prestación del servicio en las condiciones actuales," añadió el vocero de TBA.