Hallan en EEUU a 18 de 33 cubanos 'secuestrados' en México
La dependencia dijo que dos cubanos fueron detenidos en México e identificados como Nairobi Claro Ortega y Noriel Veloz, por presuntamente haber traslado al grupo de 33 personas procedentes de Cuba a México.
En una inusual operación el 11 de junio, el comando armado supuestamente perteneciente a una red internacional de tráfico de personas, interceptó y se llevó un autobús en el que viajaban los 33 cubanos y cuatro centroamericanos, según versiones oficiales.
Los indocumentados eran trasladados por agentes migratorios del balneario turístico caribeño de Cancún, donde habían sido detenidos, hacia la ciudad de Tapachula, Chiapas, fronteriza con Guatemala y a unos 880 kilómetros al sureste de la capital mexicana.
Al menos seis hombres encapuchados y con armas de alto poder detuvieron el autobús en una zona selvática de Chiapas y obligaron a los agentes migratorios -que no viajan armados- y a los choferes a descender del vehículo, que se lo llevaron con los 37 indocumentados, informó la PGR y del Instituto Nacional de Migración (INM).
Hasta ahora no se ha informado oficialmente quiénes serían los hombres armados. En Chiapas, funcionarios migratorios dijeron que estarían vinculados a una red internacional de tráfico de personas.
La PGR mantiene retenidos e investiga a nueve funcionarios del INM y a los dos choferes del autobús para determinar su posible participación en los hechos.
La Procuraduría refirió que personal de su delegación en San Antonio, Texas, tomó testimonio de los cubanos que lograron llegar a ese territorio, quienes refirieron que luego del "secuestro" fueron llevados a una casa de seguridad en la ciudad de Veracruz, en el estado del mismo nombre y cercano a Chiapas, donde les tomaron fotografías instantáneas que fueron pegadas a hojas con sellos -al parecer falsos- del INM, en las que se "ordenaba su salida del país".
Cada cubano con una de esas hojas, fueron llevados a una central de camiones en Veracruz, a 295 kilómetros al este de la ciudad de México, donde fueron divididos en grupos y les fue entregado dinero para que pudieran transportarse vía terrestre a la frontera con Estados Unidos.
En el lado mexicano de la frontera se les recogieron las hojas y se les entregó más dinero para cruzar la frontera. En Hidalgo, Texas, fueron detenidos por la Patrulla Fronteriza estadounidense.
La PGR dijo que inició un proceso por violación a la Ley General de Población en contra de los cubanos Claro Ortega y Veloz, con residencia en Miami, "debido a que estas personas fueron quienes los trasladaron de Cuba a México".
Ambos fueron enviados a prisión pero luego dejados en libertad bajo fianza y "se negaron a abandonar su lugar de reclusión, ante el temor de sufrir daños físicos".
No se informó el posible paradero de los 15 cubanos restantes, ni de los cuatro centroamericanos (tres guatemaltecos y un salvadoreño) que también iban en el autobús.
En una inusual operación el 11 de junio, el comando armado supuestamente perteneciente a una red internacional de tráfico de personas, interceptó y se llevó un autobús en el que viajaban los 33 cubanos y cuatro centroamericanos, según versiones oficiales.
Los indocumentados eran trasladados por agentes migratorios del balneario turístico caribeño de Cancún, donde habían sido detenidos, hacia la ciudad de Tapachula, Chiapas, fronteriza con Guatemala y a unos 880 kilómetros al sureste de la capital mexicana.
Al menos seis hombres encapuchados y con armas de alto poder detuvieron el autobús en una zona selvática de Chiapas y obligaron a los agentes migratorios -que no viajan armados- y a los choferes a descender del vehículo, que se lo llevaron con los 37 indocumentados, informó la PGR y del Instituto Nacional de Migración (INM).
Hasta ahora no se ha informado oficialmente quiénes serían los hombres armados. En Chiapas, funcionarios migratorios dijeron que estarían vinculados a una red internacional de tráfico de personas.
La PGR mantiene retenidos e investiga a nueve funcionarios del INM y a los dos choferes del autobús para determinar su posible participación en los hechos.
La Procuraduría refirió que personal de su delegación en San Antonio, Texas, tomó testimonio de los cubanos que lograron llegar a ese territorio, quienes refirieron que luego del "secuestro" fueron llevados a una casa de seguridad en la ciudad de Veracruz, en el estado del mismo nombre y cercano a Chiapas, donde les tomaron fotografías instantáneas que fueron pegadas a hojas con sellos -al parecer falsos- del INM, en las que se "ordenaba su salida del país".
Cada cubano con una de esas hojas, fueron llevados a una central de camiones en Veracruz, a 295 kilómetros al este de la ciudad de México, donde fueron divididos en grupos y les fue entregado dinero para que pudieran transportarse vía terrestre a la frontera con Estados Unidos.
En el lado mexicano de la frontera se les recogieron las hojas y se les entregó más dinero para cruzar la frontera. En Hidalgo, Texas, fueron detenidos por la Patrulla Fronteriza estadounidense.
La PGR dijo que inició un proceso por violación a la Ley General de Población en contra de los cubanos Claro Ortega y Veloz, con residencia en Miami, "debido a que estas personas fueron quienes los trasladaron de Cuba a México".
Ambos fueron enviados a prisión pero luego dejados en libertad bajo fianza y "se negaron a abandonar su lugar de reclusión, ante el temor de sufrir daños físicos".
No se informó el posible paradero de los 15 cubanos restantes, ni de los cuatro centroamericanos (tres guatemaltecos y un salvadoreño) que también iban en el autobús.